El año 2018 nos trajo muchas setas y aunque no soy de ir a buscarlos a la montaña hemos podido encontrar en las fruterías cantidad de tipos de setas y en concreto una que me gusta mucho que aquí llamamos Rovellons, aunque según la zona de España la podemos encontrar con nombres como mízcalo, níscalo, rebollón o robellón y seguro que algún otro nombre más.
Ingredientes:
- ½ kg. de Rovellons (níscalos)
- 900 g. de aceite de oliva o girasol.
- 1 ajo entero partido
- 6 bolitas de pimienta
- Ramillete de tomillo
- 1 cucharada de postre de Orégano
- 1 cucharada de postre de Romero
- 1 cucharada de postre de Hierbas provenzales
- 1 cucharada de postre de sal
- 2 cucharadas de postre de pimentón dulce
- ¾ de vaso de vinagre de vino
Primero de todo revisar las setas Rovellón que no estén cucadas y limpiar con un cepillo. Si es necesario las podemos lavar con agua aunque es recomendable evitarlo, si lo hacemos que sea para efectuar el escabeche al momento y secarlas por papel absorbente. Cuanto más pequeña sea la seta mejor nos quedará el resultado final.
Poner en una olla el aceite de oliva o girasol (vosotros elegís que aceite vais a poner) pero siempre soy partidaria del AOVE y añadir la mitad de un ajo entero (observar la foto si luego queremos aprovecharlo para añadir al plato), añadir la pimienta y todas las hierbas mencionadas en “ingredientes”.
Poner a infusionar al fuego (hacer que hierva el aceite y parar el fuego)
Añadir 1 cucharada de postre de sal y 2 cucharadas de pimentón dulce.
Aseguraros que tenemos la infusión templada fuera del fuego y añadir ¾ de vaso de vinagre de vino (ojo en este paso porque el vinagre puede reaccionar).
Añadir las setas (rovellons o níscalos) y volver a hervir, y en cuando nos haga el chup-chup ya podemos parar el fuego.
Dejar reposar al menos 24 hrs antes de degustar, pero si conseguís no devorarlos inmediatamente os pueden durar varias semanas perfectamente en el frigorífico en un tarro de cristal.
Si queréis saber más sobre tarros de cristal, esterilización y envasado al vacío no os perdáis otro post de nuestro blog. «Esterilización de tarros para conservas»